Santo Domingo Este se encuentra inmerso en la búsqueda del joven Adaury Miguel Castillo Valera, conocido cariñosamente como “Miniquito”, quien no ha sido visto desde que un desafortunado evento en el mar tuvo lugar la tarde del jueves en el sector Los Mameyes. Según las declaraciones de sus acompañantes, el niño estaba jugando en las aguas costeras de la Avenida España cuando la situación meteorológica se tornó en su contra, llevando al menor mar adentro.
Relatos de testigos subrayan que “Miniquito”, en compañía de otros niños del vecindario, se acercó a la orilla del mar para disfrutar del agua, a pesar de las persistentes lluvias que caían ese día. En un instante, y ante la mirada atónita de sus amigos, una corriente repentina lo envolvió, separándolo de la seguridad de la orilla e impulsándolo hacia lo desconocido. Este evento ha dejado una profunda impresión en los presentes y ha movilizado a la comunidad en conjunto con las autoridades de Santo Domingo Este.
Operativo de búsqueda en marcha continua
Desde el momento en que se conoció la desaparición, equipos de rescate compuestos por integrantes de la Policía Nacional, el Cuerpo de Bomberos y la Defensa Civil, junto a los residentes locales, han sumado esfuerzos para localizar al menor. Las labores de búsqueda son predominantes a lo largo de la costa de la Avenida España, donde se centra la operación, con la esperanza de emitir una respuesta pronta y positiva. Según informaciones proporcionadas, los compañeros de “Miniquito” han sido interrogados por las autoridades para esclarecer los detalles del suceso.

Imágenes de las cámaras de vigilancia en las inmediaciones de la Escuela Celina Pellier capturaron el último avistamiento de Adaury Miguel antes de que desapareciera de la vista. Este punto de referencia ha sido crucial en la orientación de los esfuerzos de búsqueda, que se mantienen firmes en medio de la incertidumbre prevaleciente. Rescatistas reconocen las dificultades inherentes a trabajar bajo condiciones climáticas adversas, sin embargo, su determinación sigue siendo inquebrantable.
Preocupación y medidas de precaución en la comunidad
El incidente ha suscitado un llamado urgente a la precaución entre los habitantes de Los Mameyes, quienes han expresado su preocupación por la falta de vigilancia en zonas costeras, especialmente durante temporadas de intensas lluvias. La cercanía del mar y la influencia de fuertes corrientes son factores conocidos por los vecinos, quienes abogan por un aumento de medidas de seguridad y la supervisión cercana por parte de los adultos responsables.
En respuesta a la creciente inquietud, las autoridades han reiterado la importancia de la supervisión paterna, resaltando los peligros que pueden surgir de manera inesperada en ambientes naturales. La comunidad ha sido instada a mantenerse vigilante y a reportar cualquier indicio que pueda contribuir al progreso de la búsqueda. Mientras el despliegue de rescatistas continúa sin cesar, familiares y amigos de “Miniquito” se congregan con esperanza alrededor del área, abrazados por el apoyo de una comunidad unida por el deseo de un desenlace feliz.
En las próximas horas, se espera que las autoridades ofrezcan más información sobre los avances registrados en la operación de rescate, así como cualquier acción preventiva que será implementada para evitar futuros incidentes similares. Este caso ha puesto en evidencia la importancia de la colaboración entre instituciones y la comunidad, reforzando la necesidad de protocolos que ayuden a preservar el bienestar de los ciudadanos más jóvenes en situaciones de riesgo.
