Un caso de presunta n3gl1g3nc1a médica ha conmocionado al país, dejando a Emely Reyes, una joven de 21 años de Moca, sin una parte de su brazo. El incidente ocurrió en el Hospital Toribio Bencosme, donde Reyes acudió por problemas de gastritis y náuseas.
La v1ct1ma, estudiante de enfermería, recibió una canalización para medir gases arteriales contra su voluntad. En los días posteriores, su brazo presentó una inflamación anormal y manchas extrañas. A pesar de las advertencias, el personal del hospital insistió en que la reacción era normal.
Ante el empeoramiento de su condición, Reyes fue trasladada a un centro médico en Santiago, donde los médicos se vieron obligados a amput4r parte de su brazo para salvar su vida. Este trágico desenlace ha truncado su carrera y alterado drásticamente su futuro.
Las autoridades del Hospital Toribio Bencosme aún no han ofrecido explicaciones sobre lo sucedido. Reyes, quien padece diabetes y era paciente recurrente, continúa en busca de respuestas mientras enfrenta las devastadoras consecuencias de esta experiencia.
