La comunidad periodística dominicana se encuentra de luto tras el lamentable deceso de la respetada periodista Patricia Pérez, quien dejó de existir el pasado jueves en Santo Domingo debido a complicaciones cardíacas. La noticia ha generado un profundo pesar entre colegas y conocidos de la región Este del país, donde Pérez era reconocida por su destacada trayectoria profesional y su inquebrantable compromiso con la verdad.



Legado de integridad y compromiso
La periodista, oriunda de Higüey pero residente en la ciudad de La Romana, había dedicado años de servicio al periodismo, dejando una marca imborrable en el ámbito informativo local. Comenzó su carrera profesional en el semanario El Tiempo, parte del Grupo de Medios EB, donde sus reportajes sobre temas de municipalidad, educación y salud reflejaron un enfoque humano y riguroso. Sus colegas destacan que siempre actuó con ética y responsabilidad, convirtiéndose en un pilar para la calidad informativa del medio.
La partida de Pérez a la edad de 35 años representa una pérdida significativa para el periodismo regional. Sus proyectos siempre estuvieron cargados de un fervor por la comunicación al servicio de las necesidades comunitarias. Además, su dedicación al periodismo llegó acompañado de un indiscutible amor por su hija de dos años, quien ahora queda en manos de familiares y amigos cercanos que destacan la fortaleza y valentía de Pérez en cada faceta de su vida.
El impacto comunitario de una figura respetada
Tras el conocimiento de su deceso, una gran cantidad de mensajes de condolencia inundaron las redes sociales y medios locales, reflejando el aprecio y reconocimiento hacia su trabajo. Distintas personalidades del ámbito periodístico y figuras de la comunicación elevaron su voz para destacar el legado de Patricia, su notable aporte al fortalecimiento del discurso informativo y su habilidad para abordar temas de calado social con una visión crítica y equilibrada.
El Grupo de Medios EB, en un emotivo comunicado, expresó su solidaridad con la familia de la fallecida y reiteró el impacto positivo de sus años de servicio en la empresa. “Es un ejemplo de compromiso y profesionalismo indudable”, señaló el comunicado, remarcando además el vacío que deja su partida en quienes compartieron proyectos con ella.
En un gesto de reconocimiento póstumo, las autoridades locales y representantes de diversos medios han manifestado su intención de homenajear su legado en ceremonias que se planifican para las próximas semanas. Este homenaje no solo celebrará su contribución perdurable al periodismo dominicano, sino que también reafirmará los valores de integridad y dedicación que tanto defendió.
Mientras la comunidad absorbe el impacto de su partida, se espera que en los días siguientes se emitan más tributos y que se establezcan medidas conmemorativas que reflejen no solo su labor profesional, sino también el valor que aportó a través de su compromiso personal con las causas en las que profundamente creyó. La Asociación Dominicana de Periodistas ha anunciado que seguirá trabajando para asegurar que el legado de Patricia permanezca presente en las futuras generaciones de comunicadores, subrayando la relevancia de la ética y la precisión en el ejercicio del periodismo.
