En los últimos meses, la situación de violencia y agresiones hacia mujeres en República Dominicana ha generado preocupación. En esta ocasión, es oportuno hacer un seguimiento informativo sobre el caso del ítalo-colombiano Michael Saba, quien actualmente se encuentra detenido por el homicidio y desmembramiento de la venezolana Yenny Carolina Pérez.
Sorprendentemente, Saba ya había enfrentado cargos judiciales a principios de este año por casos de violencia de género. En febrero, fue llevado ante la justicia por un crimen relacionado. La conexión entre estos eventos y el posterior crimen de Yenny plantea preguntas sobre la efectividad de las medidas legales para abordar casos de violencia de género y proteger a las víctimas.
Los detalles del crimen más reciente revelan que Saba alquiló un apartamento en la torre Suites By Refa en el sector Piantini. La noche del 21 de diciembre, cerca de las 12 de la noche, Pérez acudió a este lugar, donde lamentablemente perdió la vida.
La investigación reveló que Pérez había acordado con el taxista que la llevó a la cita, regresar en dos horas, pero pidió más tiempo (a las 1:50 a.m. cuando el taxista le escribió), alegando que le habían pagado generosamente y quería bailar, por lo cual le pidió al taxista que bajara por ella a las 4:40 a.m.
Pues a las 4:07 minutos la víctima le volvió a pedir al taxista que se demorara un poco más, ya que dijo que este le había pagado muy bien y que había consumido una cantidad considerable de sustancias ilícitas.
Yenny nunca bajó, y su hermana, preocupada, desencadenó una serie de eventos que llevan a la detención de Saba, quien planeaba abandonar el lugar. Al inspeccionar el lugar, el torso de Pérez estaba en una maleta, su cabeza y parte de los muslos en el refrigerador, y los pies en un bulto negro.
Yeisy, hermana de la víctima, al notar que su prójima no llegaba, y entendiendo que iba a verse con el verdugo, decidió contactar a la exnovia de este para que ella le facilitara su número de teléfono, a lo cual está no accedió y se ofreció a llamarlo e informarle de la preocupación.
Detalla que, habiéndolo contactado, la joven informó que Michael dijo que Yenny ni siquiera llegó al encuentro.
La hermana de la víctima decidió entonces contactar al taxista y este le confirmó que había llevado a Yenny a la torre Refa, donde prontamente fueron con un raso de la Policía para iniciar las investigaciones, que permitió la captura del ítalo-colombiano en el preciso momento en que iba a abandonar el sitio.
El Ministerio Público espera que, por este terrible caso, se le imponga este próximo miércoles, la medida de prisión preventiva al verdugo.