Con una mezcla de dolor y determinación, los padres de una niña de nueve años que se encuentra en estado crítico claman por justicia en el sector Capotillo, Distrito Nacional. El pasado miércoles, su hija quedó gravemente afectada como resultado de un hecho violento que ha sacudido a toda la comunidad, teniendo como desenlace su ingreso en la unidad de cuidados intensivos del hospital Marcelino Vélez Santana.
La menor está siendo atendida por un equipo médico que trabaja incansablemente para mitigar las severas lesiones causadas por un proyectil. Los doctores, que no han cesado de monitorear el delicado estado de salud de la pequeña, buscan todas las alternativas médicas posibles para evitar consecuencias irreversibles. Según trascendió, el proyectil impactó su columna vertebral, ocasionando daños profundos que condicionan su recuperación.
Familiares al borde del desaliento pero aferraos a la justicia
En una entrevista emotiva, Nairoby Martínez, madre de la niña, describe el momento como su peor pesadilla. Con cada palabra, deja entrever la profunda impotencia y el miedo que implica la posibilidad de que su hija no vuelva a caminar. “Nos dicen los médicos que debido a la fragilidad ósea de mi niña, el impacto podría tener consecuencias definitivas”, expresó entre lágrimas. Al borde del desaliento, la familia aguarda con ansias un próximo reporte que ofrezca claridad y esperanza sobre la situación. Juan Carlos Tejeda, padre de la menor, comenta que el equipo médico confirmó sus temores iniciales tras realizar pruebas especializadas que delinearon un panorama complicado, pero no exento de trabajo y dedicación.
Mientras los padres soportan esta angustia, la comunidad se mantiene cercana, ofreciendo un invaluable apoyo moral y práctico desde que ocurrió el lamentable incidente. Los vecinos, quienes fueron testigos del suceso, no dudaron en transportar a la menor al hospital en un intento desesperado por salvar su vida. Este acto de solidaridad ha fortalecido el vínculo comunitario y simboliza un grito colectivo de justicia.
El sector Capotillo espera respuestas y medidas concretas
El caso ha resonado fuertemente en los alrededores de Capotillo, donde la población demanda mayor eficacia en la investigación para discernir las responsabilidades y prevenir futuros actos similares. La comunidad no solo refleja el miedo compartido ante la vulnerabilidad infantil, sino también la exigencia de un entorno seguro y digno para sus hijos. Según los residentes del sector, es imperativo que las autoridades refuercen las medidas de control y vigilancia en la zona a fin de evitar que episodios tan trágicos se repitan.
Ante esta exigencia colectiva, la familia mantiene la esperanza de que las autoridades judiciales logren llevar a los responsables ante la justicia. Mientras tanto, agradecen profundamente el respaldo incondicional recibido y reiteran su deseo de continuar luchando hasta que se hagan responsables de este acto.
Las autoridades pertinentes siguen con las indagaciones necesarias para esclarecer el incidente que mantiene en vilo no solo a los allegados de la afectada, sino a toda la comunidad de Capotillo. Se espera que en los próximos días se emita un informe oficial que arroje luz sobre los hechos y el alcance de las medidas futuras.