SANTO DOMINGO ESTE. En el sector de Los Mameyes, un episodio ha conmocionado a la comunidad tras la desaparición de Adaury Miguel Castillo Valera, un adolescente de 13 años, quien no ha sido visto desde que salió a disfrutar en las aguas generadas por la tormenta Melissa. La situación ha generado un despliegue de esfuerzos conjuntos entre familiares, amigos y diversas entidades para dar con su paradero.
Una comunidad unida en la búsqueda
Desde que se reportó la desaparición de Adaury, Liselote Valerio, su madre, ha encabezado la movilización vecinal en el sector. Describiendo a su hijo como un joven cariñoso y servicial, destaca cómo el comportamiento modelo del adolescente ha sembrado una profunda preocupación entre los residentes. “Toda ayuda es valiosa. Era un muchachito sano, no se ponía de malcriado”, comentó entre lágrimas. Debido a su afectuosa personalidad, los vecinos no han dudado en unirse en la búsqueda.

En colaboración con el Cuerpo de Bomberos y otras entidades de rescate, los residentes han intensificado sus esfuerzos, rastreando las áreas afectadas, especialmente alrededor de la Escuela Celina Pellier, donde el joven fue visto por última vez. Su pasión por el baloncesto era bien conocida, y muchos de sus compañeros también han sido partícipes activos en los voluntariados de localización, reflejando la estima que Adaury se ganó en su entorno.
Reforzamiento de medidas de seguridad
Ante la crítica situación meteorológica, las autoridades han incrementado la presencia de equipos de emergencia para evaluar de manera continua los riesgos asociados a las precipitaciones. La tormenta Melissa ha traído intensas lluvias que han ocasionado crecidas de agua significativas en varias localidades de Santo Domingo Este, lo que ha complicado las labores de búsqueda.

Desde el lamentable incidente, la familia de Adaury ha solicitado a la población mantenerse atenta y brindar información que pueda contribuir a su ubicación. Esta angustiante espera mantiene en vilo a los allegados, quienes ansían poder dirigir un cierre digno a esta desafiante situación.
El caso de Adaury ha puesto de manifiesto la necesidad de implementar medidas preventivas más efectivas para mitigar los riesgos asociados a situaciones meteorológicas adversas. La comunidad ha iniciado además varios encuentros para coordinar esfuerzos futuros y reforzar la concienciación sobre la seguridad durante eventos de este tipo.
A día de hoy, los esfuerzos de búsqueda continúan bajo la supervisión de las instituciones pertinentes, quienes trabajan para proporcionar una respuesta rápida y efectiva. Se espera que las autoridades emitan un comunicado oficial pronto, actualizando sobre el progreso de las acciones implementadas y las conclusiones derivadas de las investigaciones correspondientes en torno al incidente en Los Mameyes.
