En un hecho que ha causado conmoción en Santo Domingo Este, una familia ha denunciado una presunta negligencia médica en torno a la triste pérdida de la pequeña Abby Batista Cuevas, una bebé de tan solo once meses. Los familiares señalan a la Clínica Integral III como el centro donde, aseguran, no se brindó la atención adecuada, lo que habría derivado en el desenlace fatal. Este caso ha encendido las alarmas, no solo entre los afectados directos sino también en la comunidad, que ahora sigue con atención el desarrollo de esta preocupante situación.
La menor, según lo han expresado sus allegados, se encontraba en plena etapa de crecimiento, mostrando sus primeros pasos con una alegría que sus familiares no dejan de recordar con emoción. La familia tenía previsto celebrar su primer año de vida el próximo 5 de noviembre, lo que hace aún más dura esta pérdida. Dicha celebración, que prometía ser un momento de alegría y unión familiar, ha tomado un giro inesperado desencadenando un sentimiento de luto y búsqueda de respuestas.

La búsqueda de justicia y respuesta
Según el relato de los familiares, el día de la consulta, se presentaron en el mencionado centro médico en busca de una valoración para la pequeña Abby. Sin embargo, aseguran que durante el proceso se produjeron ciertas irregularidades que, según ellos, fueron determinantes en el desgraciado desenlace. Este conjunto de eventos ha llevado a los afectados a exigir una investigación profunda sobre el manejo del caso por parte de la institución de salud.
La comunidad sigue de cerca esta exigencia de justicia, esperando que las autoridades competentes respondan prontamente. La familia Batista Cuevas ha puesto su confianza en que una intervención oficial revele cualquier posible negligencia que hubiera conducido a la pérdida de su pequeña. En este contexto, el papel de las autoridades sanitarias y judiciales será esencial para esclarecer los hechos y, de ser necesario, tomar las acciones legales pertinentes.

Impacto y respuesta de la comunidad
El incidente no solo afecta directamente a los involucrados, sino que también ha repercutido en el ámbito local, donde reina un clima de incertidumbre y empatía hacia la familia en duelo. La falta de una respuesta oficial hasta el momento por parte del centro médico ha generado un llamado a la transparencia y celeridad en la comunicación de los hallazgos preliminares y las medidas correctivas que pudieran aplicarse.
En esta disyuntiva, cabe destacar los llamados a que se fortalezcan los protocolos de atención en todos los centros, evitando así que situaciones similares se repitan y garantizando que el servicio de salud cumpla con los estándares internacionales en el cuidado de los pacientes. La comunidad ha expresado su solidaridad a través de vigilias en memoria de Abby, exigiendo justicia para honrar su memoria.
Se espera que en los próximos días se emita un comunicado oficial por parte de las autoridades sanitarias y del centro involucrado, aclarando las circunstancias del caso. La familia, junto con grupos de apoyo comunitarios, mantiene la esperanza de que esta investigación arroje luz sobre lo acontecido y siente precedentes importantes en la mejora de la atención médica en la región.
