En un suceso que ha conmocionado a la comunidad de Higüey, la madrugada del sábado una niña de apenas 10 años fue encontrada sin signos vitales en su residencia, ubicada en el sector Villa Cerro de la provincia La Altagracia. El hallazgo fue realizado por su abuelo, quien tras notar que los menores de la casa no respondían a sus llamados, forzó la puerta de la habitación descubriendo la desgarradora escena.

La niña, identificada únicamente como Y. G. M., fue hallada en el suelo de una de las habitaciones, mientras que su hermano, L. V. G., de 15 años, fue localizado escondido en el mismo espacio. De acuerdo con el informe de la médico legista Ruth Esther Almánzar, la causa de la falta de signos vitales apuntó a una constricción en el área del cuello, desencadenando una investigación exhaustiva por parte de las autoridades.
Esfuerzos policiales para esclarecer el caso
En un intento por entender la totalidad de los hechos, miembros de la Policía Científica han recopilado pruebas en el lugar, incluyendo un preservativo fuera de su envoltorio, lo que ha motivado a ampliar las líneas de investigación sobre el contexto en que ocurrió este desafortunado evento. La intervención busca entender cada detalle que condujo al suceso y así determinar las acciones judiciales necesarias.

El caso ha levantado numerosas preguntas en la población de Higüey, conmocionando a vecinos y allegados quienes describen a la familia como reservada. Mientras tanto, el joven bajo sospecha se encuentra detenido en la Subdirección Regional de Investigación de la Policía Nacional en La Altagracia. Según declaraciones del abuelo, el adolescente permanece bajo tratamiento psicológico debido a trastornos mentales que requieren vigilancia continua, circunstancia que ya había suscitado medidas de precaución familiares.
Atención y reacción de la comunidad
La comunidad ha reaccionado con sentimientos encontrados, combinando la tristeza y el asombro al saber que un hecho tan complejo ha ocurrido en su entorno. Vecinos del sector Villa Cerro destacan la necesidad de una intervención comunitaria que incluya programas de salud mental y visitas regulares de especialistas para prevenir situaciones similares.
El cuerpo de la menor fue trasladado al Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif) en San Pedro de Macorís, donde se llevarán a cabo estudios detallados que permitan esclarecer con total claridad la causa definitiva de su desaparición. Esta medida forma parte del protocolo estándar en sucesos de esta naturaleza, procurando además el respeto a las normas forenses y legales vigentes.

Se espera que en los próximos días las autoridades competentes ofrezcan un informe pormenorizado que no solo proporcione respuestas al entorno familiar y social, sino que también contribuya a recobrar la confianza de la comunidad en los procesos judiciales. La administración local ha manifestado su intención de garantizar que se lleve a cabo una investigación imparcial y exhaustiva, prometiendo a los ciudadanos transparencia en los procedimientos.
Mientras tanto, la población aguarda con ansiedad por el desenlace de los hallazgos periciales, con la esperanza de adentrarse en una situación que aún se mantiene cubierta de múltiples incógnitas.
