Kamala Harris acepta debatir contra Donald Trump el 23 de octubre, pero el exmandatario rechaza la invitación alegando que es demasiado tarde.
El próximo debate entre Kamala Harris y Donald Trump, que se plantea para el 23 de octubre de 2024, ha generado atención mediática. Mientras la vicepresidenta Harris ha aceptado la invitación de CNN para participar en un evento en Atlanta, Donald Trump ha rechazado la oferta, argumentando que ya es demasiado tarde en el proceso electoral.
La campaña de Harris, representada por Jen O’Malley Dillon, enfatizó que los debates son esenciales para que los votantes evalúen a los candidatos. En un comunicado, O’Malley Dillon explicó que este nuevo encuentro permitiría contrastar las visiones de ambos sobre el futuro de Estados Unidos. Por su parte, Harris ratificó su disposición para el debate con un mensaje en X, antes conocido como Twitter, donde expresó su esperanza de que Trump acepte la invitación.
La propuesta sugiere mantener las mismas reglas del debate en el que Trump se proclamó ganador sobre Biden. Según la campaña demócrata, Trump no debería tener dificultades en aceptar esta nueva oportunidad. Sin embargo, el exmandatario republicano respondió rápidamente durante un mitin en Carolina del Norte, afirmando que “es tarde para otro debate” y que muchos votos ya han sido emitidos.
Trump recordó que ha participado en dos debates importantes: uno contra Harris y otro contra Joe Biden. En ambos, ha sido declarado vencedor por su equipo y algunos sectores de la prensa. A través de su red social, Truth Social, Trump reafirmó que no habrá un tercer debate, sugiriendo que Harris debería enfocarse en su desempeño durante el actual mandato.
A pesar de la negativa de Trump, algunos republicanos, como los senadores Rick Scott y Mitt Romney, han instado al expresidente a reconsiderar su decisión. Argumentan que este nuevo debate podría ser beneficioso para la campaña republicana, sobre todo en un estado clave como Georgia.