No existía consuelo ayer para July Montás Rodríguez, madre de un joven de 22 años a quien describe como “un muchacho que trabaja hasta limpiando piso para no hacer lo mal hecho”. Desde que escuchó el veredicto del juez que envió a su hijo a prisión preventiva por un presunto incidente de robo en el sector Cristo Rey, no ha podido contener el llanto.
En los pasillos del Palacio de Justicia, su dolor se hizo evidente con gritos y súplicas. Más tarde, tirada en el suelo frente al edificio judicial, expresó su tristeza por la decisión que envía a Henry Junior Montás, su hijo e imputado, a cumplir tres meses de prisión preventiva, convencida de su inocencia.
Relató a Diario Libre que teme por el futuro de su hijo, pues considera que la decisión judicial podría afectar su reputación y oportunidades laborales, al quedar registrado en los archivos policiales y del Ministerio Público. “Mi muchacho trabaja hasta limpiando piso y hace InDrive por no hacer lo mal hecho, y los delincuentes andan sueltos. ¿Cómo hay justicia en este país? No es justo”, exclamó entre lágrimas Montás Rodríguez.
El juez Rigoberto Sena, de la Oficina Judicial de Servicios de Atención Permanente del Distrito Nacional, dictó prisión preventiva contra el joven, medida que deberá cumplirse en el Centro de Corrección y Rehabilitación (CCR-XXVII) Najayo Hombres. Montás había sido detenido una semana antes, y su audiencia de coerción se celebró el martes.
A Henry Junior Montás se le imputa haberse asociado con otro joven, actualmente no localizado, para realizar un incidente el 26 de julio de este año, a las 10:30 de la noche, frente al parque de Cristo Rey. Según el expediente, un adolescente de 17 años habría resultado afectado por estocadas y fue despojado de una mochila que contenía unos tenis, un teléfono celular iPhone 8 Plus y 6,000 pesos. El otro implicado fue identificado como Moisés Melma.
July Montás pidió a la Fiscalía del Distrito Nacional investigar en La Agustinita y Cristo Rey, asegurando que en el momento del supuesto robo había presencia policial y cámaras de seguridad que podrían confirmar la inocencia de su hijo.
Relató que el conflicto comenzó cuando varias jóvenes se enfrentaron y una de ellas, integrante de una “banda de menores”, pidió ayuda a su grupo. Durante la riña, Henry Junior intentó buscar a un amigo, pero fue afectado por varios individuos. En defensa, aseguró, su hijo perjudicó físicamente a uno de ellos.
Montás explicó que el adolescente señalado como víctima forma parte de una banda que mantiene inquietud en el sector y que, supuestamente, ha afectado a varios vecinos. La madre identificó a quienes considera los verdaderos responsables, cuyos nombres no pueden divulgarse por disposición legal al tratarse de menores de edad.
