El cuerpo sin vida de Manuel Martín Parra, un hombre de 58 años, fue hallado dentro de una nevera en un edificio abandonado en Verón, provincia La Altagracia. La víctima, quien presentaba signos evidentes de violencia, tenía entre 72 y 96 horas de fallecido según el informe del médico legista.
El macabro hallazgo fue realizado por Rafael Báez Fortuna, Jhonny Belizair y Aneury Veloz Zorrilla, quienes alertados por un fuerte olor proveniente del electrodoméstico, descubrieron el cadáver y notificaron inmediatamente a las autoridades. Según testigos, el occiso compartía vivienda con un individuo conocido como “Antonio” y laboraba en una discoteca propiedad de alguien apodado “Panda”.
Parra era una figura reconocida en La Romana por su trabajo como parqueador en el estadio Micheli y en el Palacio de Justicia. La Policía Nacional recuperó en la escena varios objetos posiblemente vinculados al crimen, incluyendo un serrucho manchado, un martillo y un cincel.
Los restos mortales del fallecido fueron trasladados al Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif) para los análisis correspondientes, mientras las autoridades prosiguen con las investigaciones para determinar las circunstancias del crimen y capturar a los responsables.