Un niño de 8 años falleció en Albania, Caquetá, tras beber agua fría después de jugar al aire libre, lo que causó un deterioro en su salud.
Los habitantes del municipio de Albania, en Caquetá, Colombia, siguen conmocionados por el fallecimiento de Arlex Perdomo Rojas, un niño de 8 años.
El menor era estudiante de tercer grado y, según informes de medios como La Jornada y La Voz del Pueblo, sufrió una descompensación después de regresar a su hogar tras jugar al aire libre y beber agua helada.
Pese a los esfuerzos de sus familiares y del personal médico, el niño no logró sobrevivir. Según versiones preliminares, el hecho ocurrió el 14 de febrero de 2025, cuando Arlex, tras llegar a su casa acalorado, fue a la nevera para beber agua fría.
Poco después, su estado de salud se deterioró, y aunque fue trasladado a un centro asistencial, no lograron salvarle la vida.
Las autoridades continúan investigando las causas exactas del deceso, pero los medios locales señalaron que los cambios bruscos de temperatura pueden tener efectos graves, especialmente en niños y personas vulnerables. El caso ha generado preocupación sobre los riesgos que estos cambios representan para la salud.
La institución educativa donde estudiaba el niño emitió un comunicado en redes sociales expresando su dolor: “Su partida nos deja un vacío inmenso, pero su legado de amor y entusiasmo permanecerá en nuestros corazones”.
La noticia se difundió rápidamente en redes sociales, donde muchas personas expresaron su solidaridad con la familia de Arlex. La Alcaldía de Albania también expresó su pesar: “Dios recibe un ángel en el cielo, lamentamos profundamente la partida del niño Arlex Perdomo Rojas”.
Aunque no se ha confirmado oficialmente, se cree que el niño pudo haber sufrido un choque térmico debido al cambio brusco de temperatura al consumir agua fría después de estar expuesto al calor. Los profesionales de la salud explicaron que esta situación puede provocar una vasodilatación repentina, afectando el flujo sanguíneo hacia órganos vitales como el cerebro y el corazón.
Por ello, se recomienda a los ciudadanos tomar precauciones, especialmente en climas cálidos, para evitar exponer al cuerpo a cambios extremos de temperatura.
Allegados al niño indicaron que él había estado jugando al aire libre antes de regresar a su hogar, y al ingresar, se dirigió a la cocina para tomar agua fría. Poco después, comenzó a presentar síntomas de descompensación, lo que llevó a sus seres queridos a actuar rápidamente y llevarlo al centro de salud, donde no pudieron salvarle la vida.
Este trágico suceso ha dejado una profunda tristeza en la comunidad, y el caso ha reavivado la preocupación sobre los riesgos de los cambios bruscos de temperatura, especialmente en regiones con altas temperaturas.
Se recuerda la importancia de educar a la población sobre los peligros de los cambios de temperatura en el cuerpo humano y la necesidad de tomar medidas preventivas, aunque este tipo de casos sean poco frecuentes.
