El expresidente Barack Obama y la ex primera dama Michelle Obama enviaron un mensaje contundente durante la segunda noche de la Convención Nacional Demócrata (CND) en Chicago, advirtiendo sobre los desafíos que enfrenta el país y expresando un fuerte respaldo a Kamala Harris. Ambos subrayaron la importancia de la unidad y la esperanza, en contraste con el enfoque del expresidente Donald Trump.
Michelle Obama, en un tono tanto inspirador como combativo, afirmó: «Estados Unidos, la esperanza está de vuelta», y lanzó duras críticas a Trump, destacando la diferencia en comparación con su discurso en la convención de 2016, donde pidió elevarse por encima de las agresiones políticas. «Su visión limitada y estrecha del mundo lo ha llevado a sentirse amenazado por dos personas trabajadoras, altamente educadas y exitosas que, además, son afroamericanas», señaló.
Por su parte, Barack Obama describió a Trump como «un multimillonario de 78 años que no ha dejado de quejarse desde que descendió de su escalinata dorada hace nueve años». El expresidente indicó que Trump ha sido una fuente constante de quejas y que ahora, ante la posibilidad de perder frente a Harris, está aún más preocupado.
Los discursos de los Obama subrayaron la importancia del momento político, mientras Harris intenta unir a una amplia y diversa coalición para vencer a Trump en las elecciones de noviembre. Para ello, ha recurrido a figuras clave del Partido Demócrata, incluidos los Obama, celebridades, y líderes tanto progresistas como centristas, e incluso algunos republicanos.
Aunque la temática de la noche se centró en «una visión audaz para el futuro de Estados Unidos», quedó claro que la prioridad de la coalición que respalda a Harris es evitar un segundo mandato de Trump.
Antes de las intervenciones de los Obama, Harris se dirigió a unas 15,000 personas en una arena en Wisconsin, un estado clave en las elecciones. Durante su discurso, que fue transmitido parcialmente en la convención, Harris enfatizó que su campaña está «impulsada por el pueblo» y abogó por «un nuevo camino hacia adelante» que promueva la libertad, la oportunidad y el optimismo.
En Chicago, los senadores Chuck Schumer, líder demócrata en el Senado, y Bernie Sanders, independiente por Vermont y figura respetada por los progresistas, elogiaron a Harris. Además, en un gesto que podría haber irritado a Trump, su exsecretaria de prensa, Stephanie Grisham, ahora una fuerte crítica del expresidente, también subió al escenario de la convención. Grisham declaró que Trump «no tiene empatía, moral ni fidelidad con la verdad» y manifestó su apoyo a Harris, afirmando: «Amo a mi país más que a mi partido. Kamala Harris dice la verdad, respeta al pueblo estadounidense, y tiene mi voto».
Este evento refleja la importancia de la CND en la estrategia del Partido Demócrata para las próximas elecciones, destacando la unidad en torno a Harris como una figura central en la lucha contra Trump.