Diario al Día, Estados Unidos- La sustracción de paquetes entregados a domicilio representa un problema persistente para millones de consumidores en todo el territorio estadounidense.
Informes recientes indican que los llamados “porch pirates” o piratas de porche cometen hasta 250,000 apropiaciones indebidas de paquetes diariamente en el país.
Esta cifra supera los 100 millones de incidentes anuales según datos recopilados. Al menos el 45% de estadounidenses ha perdido un paquete por esta situación.
El fenómeno tiende a intensificarse durante la temporada navideña, según recoge The New York Post. Representa molestia para compradores en línea e impacto económico considerable.

Estimaciones recientes señalan que los estadounidenses perdieron aproximadamente 15 mil millones de dólares durante el último año por valor de bienes y costos asociados.
California figura entre los más impactados debido a su alta densidad poblacional y volumen de entregas. Texas aparece en primeros lugares de incidencia estatal.
Florida presenta tasas elevadas especialmente durante temporadas altas de compras. Nueva York muestra mayor prevalencia en áreas urbanas densamente pobladas del estado.
Pensilvania reporta numerosas zonas suburbanas y urbanas afectadas. Solo el año pasado, neoyorquinos registraron pérdidas por 945 millones de dólares por esta situación.

Esta cantidad duplica los 450 millones de dólares reportados por residentes de Filadelfia en el mismo período, según información disponible sobre el fenómeno.
El aumento ha llevado a residentes a instalar cámaras de seguridad, programar entregas cuando hay alguien en casa o utilizar servicios de recogida.
El congresista Josh Gottheimer de Nueva Jersey presentó el primero de diciembre el proyecto “Ley de Piratas del Porche” para endurecer sanciones contra responsables.

Actualmente, solo el correo postal de USPS está protegido a nivel federal. La propuesta convertiría la apropiación de cualquier paquete en caso federal.
Establecería multas de hasta 250,000 dólares y penas de hasta 10 años de prisión, según explicó Gottheimer durante conferencia de prensa en Ridgewood.