Diario al Día, Washington, D.C.- Cerca de 30 embajadores de carrera fueron retirados anticipadamente por instrucción presidencial, generando inquietud interna dentro del Servicio Exterior estadounidense.
La decisión impactó representaciones en África, Asia, Europa, Medio Oriente y América, dejando vacantes al menos 29 misiones, según fuentes oficiales consultadas.
La Asociación del Servicio Exterior de Estados Unidos calificó la medida como “sin precedentes”, indicando ausencia de explicaciones formales y notificación realizada repentinamente.
En condiciones habituales, estos funcionarios cumplen periodos de tres a cuatro años, pero los involucrados deberán cesar funciones desde enero próximos oficialmente.
Aunque conservarán su estatus dentro del cuerpo diplomático, deberán regresar a Washington, donde podrían recibir nuevas asignaciones o tareas administrativas futuras internas.
El Departamento de Estado defendió la decisión como un procedimiento “estándar”, resaltando que los embajadores representan personalmente al mandatario en cada país.
Este enfoque se alinea con la consigna presidencial “Estados Unidos primero”, impulsando recambios de perfiles acordes con la visión diplomática actual vigente.
África concentró el mayor número de cambios, con salidas confirmadas en 13 países, incluyendo Nigeria, Ruanda, Somalia y Costa de Marfil mencionados.
En Asia, los ajustes abarcaron misiones estratégicas como Vietnam, Filipinas y Sri Lanka, consideradas relevantes dentro de la agenda regional actual gubernamental.
Europa también registró reestructuraciones diplomáticas, con movimientos en las embajadas de Armenia, Montenegro y otras dos sedes previamente identificadas por fuentes oficiales.
En Medio Oriente, resultaron afectados jefes diplomáticos en Argelia y Egipto, mientras en América salieron representantes en Guatemala y Surinam respectivamente confirmados.
Los diplomáticos retirados fueron designados durante la administración de Joe Biden y permanecían tras una revisión inicial del mandato actual previamente realizada.
Ese proceso previo se enfocó en ajustes a nombramientos políticos, mientras esta etapa apuntaría a perfiles de carrera sin afiliación partidista declarada.
El Departamento de Estado no publicó lista oficial ni confirmó cifras definitivas, reiterando facultades presidenciales para reorganizar representación internacional vigente estadounidense actual.
La información, difundida inicialmente por Politico, generó alertas en el sindicato diplomático y sectores del Congreso estadounidense ante cambios recientes descritos públicamente.
Según lo informado, la AFSA solicita mayor claridad sobre criterios aplicados, mientras misiones enfrentan desafíos de coordinación y liderazgo operativo interno temporal.
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